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La pandemia del Covid-19 se extiende por todo el mundo con tiempos distintos de incidencia, según los países. En España las cifras indican un aplanamiento de la curva y nos preguntamos ya cómo va a ser la fase de desescalada. La única certeza es que va a ser lento.

En China están volviendo a la normalidad poco a poco y con medidas exigentes de precaución como la medición de temperatura para entrar en la mayoría de comercios; para viajar, es necesario realizar un test y obtener un código verde en una aplicación móvil que acredita estar libre del virus. Aun así, en Wuhan siguen cerrados cines, teatros y restaurantes.

En Europa también se relaja el confinamiento a cuentagotas y por países. En Austria, por ejemplo, abrirán las tiendas mañana. En la República Checa van a permitir salir a la calle para realizar ejercicio y en Dinamarca abren los colegios esta semana.

En Francia, sin embargo, Macron ha anunciado que prolonga el confinamiento hasta el 11 de mayo. Así lo han hecho también en Gran Bretaña donde han fallecido 8.000 personas desde que comenzó la crisis sanitaria. El Gobierno sueco, por el contrario, ha decidido no decretar cuarentena, apelando a la responsabilidad de los ciudadanos.

Mientras tanto, la pandemia se extiende por todo el mundo. Estados Unidos supera los 20.000 muertos y lidera ya el triste ranking de fallecidos por Covid-19.

La Organización Mundial de la Salud ha señalado que las restricciones impuestas por la cuarentena tendrán que levantarse "en su día" de forma lenta, controlada y según las regiones menos afectadas de cada país.