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Desde que comenzó el estado de alarma por el nuevo coronavirus, las denuncias por violencia machista se han reducido a la mitad. Esta circunstancia excepcional pone a las víctimas en una situación de dificultad añadida porque, en muchos casos, tienen que compartir el confinamiento con sus maltratadores.

Esta misma tarde ha sido detenido un hombre en la Avenida de la Albufera después de que un menor alertara a la Policía de que su padre estaba golpeando a su madre.

Entre el 14 y el 29 de marzo, el teléfono de violencia de género, el 016, recibió 3.382 avisos, lo que supone 521 llamadas más que en el mismo periodo del año pasado. Se han recibido, además, un 269% más de correos electrónicos y mensajes de WhatsApp.

Para todas aquellas mujeres que tengan dificultad a la hora de pedir auxilio a través de estas vías, se ha puesto en marcha una nueva iniciativa que cuenta con la complicidad de las farmacias. Solo tienen que acercarse a cualquier farmacia, pedir 'mascarilla-19' y en el mismo momento se activa el protocolo de protección. El personal de la farmacia enviará sus datos personales a las autoridades.