España tiene preparado un plan de evacuación de los españoles en Ucrania por si fuera necesario
Según ha anunciado el ministro de Exteriores, José Manuel Albares
España no ha puesto en marcha por el momento un plan de evacuación de los españoles en Ucrania, pero lo tiene preparado. Lo ha anunciado el Ministro de exteriores, que insiste en la seria recomendación de que abandonen el país. Una decisión que se ha tomado tras las informaciones que le ha facilitado la OTAN.
El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, ha explicado la decisión del Gobierno de aconsejar que no se viaje a Ucrania y que los españoles residentes en el país lo abandonen temporalmente. La decisión se ha adoptado tras atender informaciones de la situación de un aliado de la OTAN. El ministro afirma que hay un plan de evacuación previsto por si fuera necesario.
Tras una información de un miembro de la OTAN
El ministro Albares ha explicado que el viernes el Gobierno recibió una información de un aliado de la OTAN sobre la situación en Ucrania y que tras una reunión de embajadores de la Unión Europea ayer, se tomó la decisión de aconsejar no viajar a Ucrania y que los españoles residentes lo abandonen temporalmenteJosé Manuel Albares ha querido tranquilizar a los más de 400 españoles que viven en Ucrania.
La OSCE, Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa, acaba de retirar sus observadores de la zona. Australia y Portugal se han unido en las últimas horas a los numerosos países que cierran total o parcialmente sus embajadas.
El secretario de Estado de Estados Unidos, Blinken, ha asegurado que, a pesar del cierre de su delegación, el camino diplomático sigue abierto. El canciller alemán Scholz viajará esta semana próxima a Moscú para reunirse con Putin.
Los embajadores de los 30 países aliados que integran el Consejo atlántico de la OTAN están en alerta permanente tras dar credibilidad a un informe de la inteligencia estadounidense que pone una fecha muy concreta al inicio de la invasión, el próximo jueves 16 de febrero. El informe apunta que las fuerzas rusas pueden tomar hasta nueve rutas diferentes para tomar el país, y que en los combates podrían morir 50.000 civiles.
Moscú desarrollaría una “guerra híbrida” que añadiría a la convencional presión de refugiados en la frontera con Polonia y ciberataques contra infraestructuras básicas.
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