La oposición venezolana trata este sábado, con el respaldo de Estados Unidos, de iniciar el transporte de cientos de toneladas de ayuda humanitaria a través de la frontera del país con Colombia contra la oposición del presidente Nicolás Maduro, quien ha enviado tropas a la zona y ordenado el cierre de fronteras.
Se estima que 600 toneladas de alimentos, suplementos nutritivos, medicamentos y productos de higiene que provienen principalmente de Estados Unidos están almacenados ahora mismo en la ciudad fronteriza colombiana de Cúcuta.
Al menos un herido se reportó este sábado en el municipio venezolano de Ureña, fronterizo con Colombia, después de que funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB, policía militarizada) se enfrentaran con manifestantes de la zona.
El herido es un sargento de la milicia de la Fuerza Armada que participaba en este enfrentamiento en el que hubo intercambios de bombas lacrimógenas y piedras, en Ureña, ubicado en el estado fronterizo del Táchira.
También en el Táchira, donde fue ordenado el viernes que los puentes binacionales permanezcan cerrados hasta nuevo aviso, un centenar de personas se aglomeró esta jornada en el puente Francisco de Paula Santander para reclamar por el bloqueo del paso.
Las protestas han desencadenado en disturbios a un centenar de metros más arriba del puente donde Efe ha podido constatar que se registran enfrentamientos cada 20 minutos aproximadamente.
En esta zona hay varias escuelas que albergan a supuestos simpatizantes del oficialismo que se quedaron a dormir para apoyar las actividades del Gobierno en ese estado.
Fue allí donde resultó herido el sargento, identificado como Saulo Botello, quien fue impactado en la cabeza cuando los manifestantes, algunos encapuchados, lanzaban piedras contra autobuses que se encontraban cerca de las escuelas.
Los manifestantes también gritaban consignas a los supuestos oficialistas, en su mayoría milicianos, para que salgan de las instituciones y deserten.
El sargento ya fue trasladado a un centro de salud en una ambulancia y tras la tensión los milicianos salieron de los colegios, algunos llorando y se quitaron sus uniformes, al tiempo que fueron aplaudidos por los manifestantes.
MILITARES FACILITAN EL INGRESO DE AYUDA
En este sentido, el jefe del Parlamento venezolano y líder opositor, Juan Guaidó, celebró este sábado que militares ubicados en la frontera con Colombia se estén sumando a su "lucha" y quieran facilitar el ingreso de la ayuda humanitaria a Venezuela.
"Venezuela: no son desertores aquellos guardias y efectivos de las FFAA que decidan sumarse a nuestra lucha. ¡Han decidido ponerse del lado del Pueblo y de la Constitución! ¡Bienvenidos! La llegada de la Libertad y la Democracia a Venezuela ya es indetenible", dijo Guaidó en su cuenta de Twitter.
En otro mensaje, el líder opositor dice "Venezuela: les confirmo por este medio que varios miembros de la Guardia Nacional asignados al Puente Internacional Simón Bolívar han decidido sumarse a quienes estamos rescatando la Democracia en Venezuela. La ayuda humanitaria entrará sí o sí".
CONTINUAN LOS ENFRENTAMIENTOS
Actualmente continúan los enfrentamientos entre las personas que protestan y la GNB, mientras que una cuadra más arriba un grupo más grande se aglomera con crucifijos y rosarios para pedir a los militares que permita el ingreso de la ayuda humanitaria que el atichavismo prevé para hoy pese a la negativa del Gobierno chavista.
Con todo, el Gobierno de Nicolás Maduro aseguró que en la frontera con Colombia hay "absoluta normalidad" y culpó a Colombia de querer "dañar" la paz de Venezuela.
"Aquí estamos frontera de paz, frontera tranquila y seguimos adelante con la fiesta bolivariana", dijo un portavoz del Gobierno chavista, Freddy Bernal, vía telefónica al canal estatal VTV, desde el puente internacional Simón Bolívar, que sí se encuentra en calma de acuerdo a lo verificado por Efe.
Bernal, quien ejerce el cargo de "protector" de Táchira -un cargo que creó Maduro luego de que la Gobernación de ese estado pasara a manos de la oposición- acusó a Colombia de estar tratando de dañar la paz de Venezuela y de crear "falsos positivos