En Vallecas, junto a la casa bombardeada que fotografió Robert Capa en la Guerra Civil se acaba de inaugurar un gran mural en homenaje al icónico foto-reportero.
Ocupa cien metros de un solar abandonado que se va a recuperar para que sea un lugar de la memoria de la guerra junto a la casa de Peironcely.
Peironcely 10, casa construida en 1927 e inmortalizada por el fotógrafo húngaro en 1939, ha quedado inmortalizada en el imaginario colectivo con marcas de metralla en su fachada y niños jugando entre la devastación de la guerra.