Los bares cercanos a los estadios sufren pérdidas de hasta un 70 % por la falta de clientes

La falta de público en los estadios está perjudicando seriamente a los bares aledaños. La ausencia de espectadores en los partidos también la sufren los bares anexos a los estadios.

Algunos sufren pérdidas de hasta el 70 por ciento. Antes de la pandemia facturaban una media de cinco mil euros cada vez que había un encuentro grande de fútbol. No sólo los futbolistas echan de menos a sus aficionados.

“Esto es una ruina total”

Los bares que rodean los estadios se han quedado también sin público futbolero. “Esto es una ruina total” lamentan. “Los partidos es lo que nos da de comer” reconocen.

Y sin gente, la hostelería se apaga. Ana mira de reojo el Metropolitano y hace cuentas de lo que está perdiendo. “La facturación ha bajado casi un 70 %. Éramos el doble de plantilla que ahora, el treinta por ciento de los ingresos de un día normal se ha perdido” asegura.

“Todo el mundo tiene miedo por el coronavirus"

A pocos metros, Nuria examina la caja de su bar y se le cae el alma a los pies. “Es un empuje, aunque no vivimos de fútbol, es un empuje muy grande” reconoce.

Por Chamartín, más de lo mismo. En días de partido grande en el Bernabéu, la recaudación del Orsay se disparaba. “Todo el mundo tiene miedo por el coronavirus y ya se quedan en su casa”.

Por culpa del covid ahora tampoco se juntan los aficionados en los bares para ver los partidos. “Si logramos subsistir, aquí estaremos esperándoles” aseguran desde el sector. Que sepan los hinchas que allí les esperan con los brazos abiertos.