Los comerciantes del Rastro se han concentrado de nuevo este domingo para denunciar que el Ayuntamiento de Madrid pretende "desmantelar" el mercadillo histórico e imponer un modelo nuevo "reduccionista" que elimina las zonas temáticas y "conserva sólo el nombre".
Así lo han manifestado a Efe la portavoz de la Asociación El Rastro Punto Es, Mayka Torralvo, y el representante de la Asociación ASIVERAS y portavoz de la Plataforma de Comerciantes Ambulantes de la Comunidad de Madrid, Pedro Santos.
Unas 500 personas se han concentrado entre las 11:00 y las 14:30 horas en torno a la plaza de Cascorro para expresar su rechazo al plan presentado por el Ayuntamiento para retomar la actividad del mercadillo tras la pandemia del coronavirus.
"Deseamos llegar a un acuerdo con el Ayuntamiento; que el Rastro siga siendo el Rastro y que no pierda su escencia", ha dicho Torralvo a Efe.
El miércoles pasado, el Consistorio presentó a los comerciantes un segundo plan -ante el rechazo por los comerciantes de otro presentado previamente- que prevé la apertura de 350 puestos en cuatro viales unidireccionales.
Según el Ayuntamiento, sería un Rastro sin callejuelas, dividido en tres zonas acordonadas, que reabriría en tres fases y con solo uno de cada cuatro puestos.
Como regla general solo habría puestos en calles de como mínimo 10 metros de ancho y cada área estaría vallada con zonas de entrada y salida donde se colocarían controles de aforo, una propuesta que borra del mapa las pequeñas calles del Rastro y también su epicentro, la plaza de Cascorro.
Los comerciantes proponen, por el contrario, que el 50 % de los puestos actuales abra un domingo y la otra mitad lo haga el domingo siguiente, "bajo el criterio de un puesto sí y otro no" y permaneciendo todos en sus ubicaciones habituales, con algunos ajustes, hasta que se pueda volver a instalar el 100 % de los puestos y que el control del aforo lo realice el Ayuntamiento.