Ha sido escenario de anuncios y protagonista de series de todo tipo. Y es que esta casa tiene algo especial: está construida a base de placas de acero. Sin embargo, no desprende un brillo metálico por dentro, ni es fría. Los grandes ventanales y la combinación con los muebles, ayudan a convertir a esta casa de acero en un lugar muy confortable.
Una casa sin tabiques
El propietario de esta peculiar vivienda de tres plantas con ascensor es arquitecto. La casa era unifamiliar y tenía tres talleres. Ahora tiene tres plantas, o tres estancias, pero todas guardan la misma estética. Y la misma curiosidad: no tienen tabiques, sino placas de acero ensambladas.
La pasión de este arquitecto (Jesús) por el metal, se nota nada más entrar en la casa. En medio del salón, un pilar de hierro retorcido llama poderosamente la atención: es un pilar con historia. Perteneció a la torre Windsor y Jesús se quedó con él durante los trabajos de demolición tras el incendio del año 2005. "Ese pilar soportó una carga de unas 10 toneladas", nos cuenta Jesús.
El techo de la casa también es de metal, y tiene 3 metros de altura. En el sótano, tiene su estudio de arquitectura.
Al preguntarle por la posibilidad de que una casa de acero tan grande pueda resultar 'fría', él responde enérgico: "Lo que le da calidez a una vivienda es el mobiliario". Y así es. Esta vivienda tiene tres plantas (numeradas, como en las oficinas), más de 450 metros cuadrados. Y sin embargo, parece un lugar cálido.