Diego de León, Bravo Murillo, O'Donnell, Lope de Vega... Madrid está repleto de calles importantes de generales, intelectuales y escritores con renombre. Pero en el callejero cuesta encontrar nombres de mujeres célebres. Y es que solo una de cada cinco calles con género en Madrid, está dedicada a una mujer.
Pero cuidado, que no es algo característico nuestra ciudad, sino que se trata de algo generalizado. De hecho Madrid es de las capitales que más calles con nombres femeninos tienen en todo el mundo (la segunda, después de La Habana). Hacemos un repaso por algunas de ellas, las más célebres.
Calles ligadas a la religión
Pocos sabrán que la calle de La Ventosa debe su nombre a una mujer, o que detrás de la calle de Arganzuela se esconde el mote con el que conocían a la hija de un alfarero. Sin embargo, estos casos de mujeres 'escondidas' tras un nombre son más bien escasos. La mayoría sí muestran de forma clara la mujer a quien se dedicó una placa del callejero.
Desde grandes luchadoras hasta intelectuales y por supuesto, religiosas. De las 726 calles con nombres de mujer en Madrid, 42 pertenecen a santas y 26 a vírgenes. La mayoría de calles con referencias religiosas a mujeres se concentran, por cierto, en la zona del barrio de la Concepción y en la de Ventas.
Calle del Carmen: Una de las calles más céntricas, una arteria que parte de la Puerta del Sol y que está dedicada a la Virgen del Carmen, patrona de los marineros y el mar.
Calle de la Magdalena: Aunque también existe otra calle de Santa María de Magdalena, la más popular es la que se encuentra entre Antón Martín y Tirso de Molina. Una calle que hace referencia a María Magdalena, referente bíblico muy importante en el Nuevo Testamento al considerarse discípula de Jesús.
Calle de Sor Ángela de la Cruz: Una calle que parte de la Plaza de Cuzco, y que hace referencia a la fundadora de la orden de las Hermanas de la Cruz, dedicadas a atender a pobres y enfermos. También es santa, ya que fue canonizada por el papa Juan Pablo II en el año 2003.
Paseo de Santa María de la Cabeza: Es la arteria que comunica la Glorieta de Atocha con la Plaza Elíptica. María Toribio, mujer del patrón de Madrid, San Isidro, debía tener una calle en Madrid. Y además de un paseo, tiene una Glorieta. Es una santa muy venerada en la capital. Su festividad es el 9 de septiembre.
Mujeres con historia y literatura en nuestro callejero
Nuestras calles también hablan de historia, de literatura y de mujeres luchadoras y reivindicativas. Aquí tenemos algunos buenos ejemplo:
Calle de Agustina de Aragón: Se encuentra entre la calle Alcántara y Francisco Silvela. Es una calle modesta, pequeña, pero que hace referencia sin embargo a un personaje histórico legendario, el de una mujer que luchó durante la Guerra de la Independencia en Zaragoza contra la invasión napoleónica. Retratada por Goya y rememorada por Lord Byron. Su nombre verdadero, por cierto, era Agustina Raimunda María Saragossa.
Calle de Concepción Arenal: Entre la Gran Vía y la encrucijada entre la calle de La Luna y la calle Desengaño, se encuentra esta pequeña calle dedicada a una gran escritora, periodista, poeta, y pionera del feminismo español. No se cansó de denunciar las condiciones y falta de derechos de la mujer en el siglo XIX. Una mujer que para poder estudiar en la Facultad de Derecho, tuvo que disfrazarse de hombre. Todo un icono de la lucha por los derechos de la mujer.
Calle de Manuela Malasaña: Una de las calles del ocio madrileño, entre la Glorieta de Bilbao y la calle de San Bernando. Manuela fue una joven de apenas 17 años que participó de forma heroica en el levantamiento de los madrileños contra las tropas francesas, el 2 de mayo de 1808.
Calle de Beatriz de Galindo: Beatriz fue escritora, gran erudita y conocedora del latín, y además, maestra de los hijos de Isabel la Católica. Se la conocía con el nombre de 'La Latina'. Sí, lo has adivinado. De ahí el nombre del barrio. Su calle parte de la calle de Segovia.
De reinas y nobleza
Y por supuesto, en Madrid también existen calles con nombres dedicados a reinas e infantas. ¿Te suenan todas estas?
Calle de María de Molina: Se encuentra entre Francisco Silvera y Gregorio Marañón, y es atravesada por López de Hoyos. Su verdadero nombre era María Alfonso de Meneses, era la hija del Infante Alfonso de Molina, y fue reina consorte de Castilla entre los años 1284 y 1292, al casarse con el rey Sancho IV de Castilla.
Plaza de Isabel II: La reina Isabel Isabel II tenía que tener un lugar privilegiado en la capital, y lo tiene. Con el teatro Real como protagonista, a esta plaza se le conoce como 'Plaza de Ópera'. Esta reina gracias al empeño de Fernando VII en derogar la ley que impedía a su hija reinar, fue una figura clave durante una época en la que tuvo que hacer frente a la revolución de 'La Gloriosa' y a las guerras Carlistas. Fue testigo del comienzo de la I República.
Calle de Isabel la Católica: Y hablamos de otra Isabel importante en nuestra historia, la reina que consiguió unir Aragón y Castilla: Isabel I de Castilla. Su calle se encuentra en Santo Domingo, entre la calle Gran Vía y Leganitos.
Calles con historias curiosas
Tras el nombre de alguna calle muy popular se 'oculta' la historia de una mujer. ¿Conoces estas?
Calle de la Ventosa: Junto al Hospital de San Francisco (el que está al lado de San Francisco el Grande), despunta una calle pequeña con un extraño nombre: Ventosa. Pues el nombre se debe a una mujer que usaba una ventosa para sanar, Juana Picazo, que vivió justo allí en el siglo XVIII y fue acusada de brujería. La calle este curioso nombre por el instrumento que utilizaba en sus curaciones.
Calle de Arganzuela: Es una calle muy popular, sin duda, pero pocos conocen el nombre de mujer que esconde. Fue el historiador Antonio de Capmany quien, en el siglo XVIII explicó que el nombre de Arganzuela fue en realidad una derivación de Sancha La Daganzuela, hija de un famoso alfarero que vivía y trabajaba en esta calle que también da nombre al distrito de Arganzuela.
Calle de Dos Hermanas: Esta calle situada entre las calles de Embajadores y Mesón de Paredes, debe su nombre a las hermanas O Campo, que vivían allí en esa calle y que dedicaron su vida a ayudar a los más necesitados. Fundaron de hecho el Convento de las Religiosas Capuchinas.
Calle de la Rosa: Se encuentra en Lavapiés (entre las calles del Ave María y la calle de Santa Isabel), y es una pequeña calle que no debe su nombre a la flor, sino a la mujer que regentaba una famosa venta en ese lugar y que se llamaba así, Rosa.