Ocurrió en Sevilla. Allí, en una vivienda del Polígono Sur, una de las zona más conflictivas de la ciudad, un padre sometió a sus siete hijos a un auténtico infierno entre insultos, humillaciones palizas y abusos sexuales. Lo hizo durante cuatro largos años, entre 2009 y 2013. Años en los que Antonio M.U., de 36 años, estuvo abusando de su hija mayor.
La Audiencia de Sevilla le ha condenado a ocho años de cárcel, seis por los abusos sexuales a los que sometió a su hija mayor y otros dos por los malos tratos, físicos y psicológicos, que también tuvo con el resto de sus hijos, en un caso que nos recuerda a la de la familia Turpin de Texas