“No llores, que vas a ser feliz” es parte de una carta terrorífica. Un documento que se entregaba a los bebés que habían sido robados y que al cabo de los años se interesaban por su pasado. Entonces, les daban esta carta, supuestamente escrita por la madre biológica. La trama, organizada en los años 40 y que se prolongó hasta mediados de los 90, sigue sin resolverse.
Desde hace un año, 46 familias en Cádiz llevan a cabo exhumaciones en el cementerio de San José en busca de respuestas. Veintisiete sepulturas abiertas hasta la fecha, y varias e inquietantes sorpresas: tres cajitas vacías, sin resto alguno, y otros tres niños que no aparecen en el recuento. Seis niños que no aparecen donde deberían estar enterrados.
Entrevistamos a Mari Cruz Rodrigo, presidenta de SOS Bebés Robados Madrid, y a la antropóloga Neus Roig, la autora de la investigación más completa realizada hasta la fecha sobre este agujero negro de la historia de España.