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Antes de presentar Operación Triunfo, Roberto Leal ya era conocido por su faceta de reportero. Pero fue con el talent show musical cuando se dio cuenta del monstruo que puede llegar a ser la fama. Una experiencia que le tocó vivir junto a Roi Méndez, exconcursante de OT.

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Todo ocurrió en el Palacio de Vistalegre de Madrid durante un concierto de Roi Méndez y Amaia, que por aquel entonces todavía estaban en la Academia de OT. Roberto Leal fue al concierto y, como presentador de Operación Triunfo, le habían regalado una entrada.

Roberto llegó a Vistalegre y, para su sorpresa, descubrió que la entrada no era en un palco ni en una zona reservada, sino que era para la grada. Era el momento álgido de OT y en el recinto había más de diez mil personas, muchas de las cuales reconocieron enseguida al presentador y empezaron a gritarle emocionadas.

Para tratar de pasar desapercibido y que no le reconocieran, Roberto decidió ir a por una gorra. ¿Cuál fue el error? Era de noche y el Palacio de Vistalegre era cubierto, por lo que el presentador era el único de los presentes con gorra.

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Pero la cosa no quedó ahí. Y es que Roi, queriendo agradecerle a Roberto todo lo que había hecho por ellos le dedicó un bonito mensaje mientras le señalaba. “Mientras me señalabas, todas esas personas me localizan”, le cuenta el presentador al exconcursante, que desconocía esta parte de la historia.

Terminó el concierto y todas las personas fueron a por un Roberto Leal que, aunque intentaba hacerse fotos con todo el mundo, se vio completamente desbordado, por lo que la seguridad del recinto tuvo que ir a socorrerle.

El presentador José Yélamo, que había ido con él al concierto, le llamó varias veces preocupado y, cuando por fin pudo cogerle el teléfono, Roberto le dijo: “¿Tú estás viendo la ambulancia que está saliendo? Pues yo voy dentro de la ambulancia”. La única manera que tuvo el presentador de abandonar el recinto.