Gente en la calle en plena ola de calor de julio | EUROPA PRESS
(Actualizado

Las hemorragias nasales suelen ser autolimitadas, por lo general, y se controlan con taponamientos, aunque en algunas ocasiones es necesario realizar un control quirúrgico del punto de sangrado, llegando a producir anemias o shocks hipovolémicos.

El servicio de Otorrinolaringología del Hospital Universitario de Torrejón advierte de factores que ayudan a las hemorragias nasales en la etapa estival.

"Son frecuentes debido a la cantidad de arterias y venas que confluyen dentro de la nariz"

Asimismo, se pueden producir con mayor asiduidad si se presentan cifras elevadas de presión arterial, si existe la presencia de varices en la nariz, si se toma algún fármaco anticoagulantes o antiagregantes.

Por ello, las personas de avanzada edad, las que emplean CPAP (presión positiva continua de las vías respiratorias) para mantener las vías respiratorias abiertas al dormir y las que se tratan con oxigenoterapia mediante gafas nasales tienen más probabilidades de sufrir estos episodios.

Cómo actuar

Ante una hemorragia nasal no deben colocar la cabeza hacia atrás, podemos taponar la fosa nasal afectada con un algodón embebido en agua oxigenada y respirar por la boca.

"Comprimir la fosal nasal taponada entre 10 y 15 minutos"

Entre las recomendaciones para prevenirlas se encuentra protegerse del sol, evitar la exposición prolongada a altas temperaturas, hidratarse con agua y llevar una dieta rica en Vitamina C y K, con frutas y verduras. También es importante evitar los entornos con polvo o humo, así como esfuerzos físicos intensos en las horas de más calor.