Durante la pandemia del coronavirus la depresión se ha multiplicado por tres, la ansiedad por cuatro y el estrés postraumático por cinco. El intento de suicidio entre los jóvenes ha aumentado un 10%.
“Los gestos auto lesivos están aumentando con claridad en una franja de edad muy problemática: preadolescentes, adolescentes y adultos jóvenes” ha señalado el Dr. Miguel Alfonso García Escudero, psiquiatra de la Unidad de Trastornos bipolares del Hospital General Universitario de Elche.
Si la demanda de la atención se multiplica por tres, por cuatro o por cinco, veremos pronto que también aumenta su consumo de antidepresivos, que siempre necesitan prescripción médica.
De hecho, dos millones de españoles consumen ansiolíticos a diario y somos, junto a los portugueses, los europeos que más ansiolíticos, sedantes e hipnóticos consumimos.
Tan importante es el diagnóstico temprano como el inicio del tratamiento porque estas enfermedades emocionales afectan incluso a los más fuertes.
Entre los adolescentes los cuadros de ansiedad son más frecuentes entre las chicas, especialmente de 4º de la ESO porque son muy autoexigentes y una forma de reivindicarse frente a los chicos es asumiendo un exceso de responsabilidades y de retos que generan un estrés añadido.
El enfado, no dormir y el llanto son signos de alarma claros que nos avisan de estar frente a problemas de ansiedad o depresión y cualquiera de ellos puede precipitar cuadros graves de salud mental entre los jóvenes.
LA CUARTA OLA
La soledad, el aislamiento, el miedo y la incertidumbre, con una sobreinformación negativa y constante, son factores que están entre los que predisponen a un aumento de casos.
Tras la primera ola de contagios de Covid-19, la segunda de pacientes de otras patologías que acuden al sistema sanitario y una tercera de pacientes crónicos y de otras dolencias que no tuvieron un diagnóstico precoz, los problemas de salud mental se han convertido en la cuarta ola.
Como señalan diferentes expertos en psicología, psiquiatría y médicos generales, una de cada cinco consultas de los centros de salud puede tener que ver con un problema de salud mental.
La Atención Primaria requiere “mucho refuerzo”, ya que suelen ser los médicos de familia los que manejan muchos de estos casos y en las consultas necesitan tiempo para hacer una entrevista de problemas emocionales, que no se puede realizar en tres minutos.
Además, los psicólogos clínicos -- señalan diferentes sociedades científicas -- deberían formar parte de las plantillas de los Centros de Salud como ocurre, por ejemplo, en el Reino Unido, una reclamación que de momento en nuestro país no ha tenido frutos.