El New York Times desata una rebelión contra Twitter tras negarse a pagar la verificación
Numerosos medios de comunicación, como el Washington Post y celebridades como LeBron James, han anunciado que tampoco pagarán por Twitter Blue
El diario neoyorquino ha anticipado un "apocalipsis" en la tecnológica por su cambio de política sobre el 'check' azul
La negativa del diario The New York Times a pagar por la verificación de su cuenta de Twitter, ha desatado una rebelión contra la red social en Estados Unidos.
La estrategia de monetización de Twitter, que entró en vigor el pasado 1 de abril, parece estar volviéndose en contra de Musk.
El Times no es el único medio en rebelarse: Los Angeles Times, The Washington Post, BuzzFeed, POLITICO y Vox han expresado de una manera u otra que se trataría de un gasto publicitario, no asociado a la credibilidad.
También se han desmarcado celebridades como el jugador de baloncesto LeBron James, que cuenta con 52 millones de seguidores en la red social. "No voy a pagar", comento en un tuit suscrito por otras figuras conocidas.
EL "APOCALIPSIS" DE TWITTER
El NYT informó el pasado viernes de su negativa a pagar el nuevo Twitter Blue, al tiempo que anticipaba un "apocalipsis" en Twitter debido a los cambios impuestos por su actual propietario Elon Musk.
El Times, que con 55 millones de seguidores está entre las 25 cuentas más seguidas de esa red social, también comunicó a sus periodistas que no les reembolsará la suscripción a Twitter Blue, salvo "casos inusuales en los que fuera necesario para trabajar".
La reacción de Twitter no se hizo esperar. Dos días después, la cuenta principal de The New York Times dejaba de lucir la verificación oficial.
Sin embargo, el resto de secciones del diario sí mantienen la distinción de Twitter, aunque no aclara si la conserva porque el usuario ha pagado la subscripción premium de 8 dólares al mes (tarifa para EE.UU.), o porque ya la tenía con anterioridad a la entrada en vigor del nuevo servicio.
Según The Washington Post, que también anunció su negativa a pagar por la marca de verificación, Musk publicó en un tuit, que posteriormente borró, que daría a las cuentas verificadas "unas semanas de gracia, a menos que digan que no van a pagar ahora, en cuyo caso lo eliminaremos".
El Post mantenía el domingo la verificación de color dorado, reservada a "organizaciones oficiales".
MUSK CONTRA EL NYT: "SU PROPAGANDA NI SIQUIERA ES INTERESANTE"
"La verdadera tragedia de @NYTimes es que su propaganda ni siquiera es interesante", escribió en su cuenta personal el magnate Elon Musk, tras conocer la negativa del diario a pagar por la verificación.
"Su perfil es el equivalente en Twitter a la diarrea. Es ilegible. Tendrían muchos más seguidores reales si solo publicaran sus artículos más importantes", añadió Musk en su mensaje.
La polémica ha generado una ola de comentarios en la red social, tanto a favor como en contra de ambas posturas.
Ya sin su verificación, la cuenta principal de The New York Times muestra en un hilo todos los canales de acceso a sus contenidos, además de Twitter.
El mismo viernes, el diario neoyorquino publicó que Elon Musk intentó reunirse con la Comisión Federal de Comercio (FTC, por sus siglas en inglés), que está investigando la política de datos y privacidad de la red social. La presidenta de la FTC, Lina Khan, rechazó dicho encuentro.
"UN PUENTE DORADO" A LA DESINFORMACIÓN
Reporteros Sin Fronteras (RSF) se ha unido a las críticas contra Twitter al poner en entredicho el nuevo modelo de gestión de la marca azul, al considerar que genera "confusión entre certificación y abonos" y que favorecerá la desinformación.
Musk "presiona a los usuarios para que se abonen a Twitter Blue bajo la amenaza de perder su marca azul.
"Con esta política, el único problema que Elon Musk intenta resolver es el de las finanzas de Twitter, que han empeorado mucho desde que él se hizo con el control", señaló en un comunicado Vincent Berthtier, responsable de Tecnologías de RSF.
Además, RSF considera que el nuevo sistema de Twitter abrirá "un puente dorado" para la actividad de las cuentas dedicadas a la desinformación.
"Se trata de asegurar que el usuario producirá 'valor' en la red social y de extraer el máximo beneficio. En cambio se desentiende completamente de proteger a los usuarios", resume el comunicado.
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