Reporteros sin Fronteras pide a la nueva CEO de Twitter que "combata la desinformación" en la red social

Las reacciones al anuncio del próximo nombramiento de Linda Yaccarino como nueva directora ejecutiva de Twitter, no se han hecho esperar. La organización Reporteros Sin Fronteras (RSF) ha pedido a la futura CEO de la compañía que proteja la difusión de noticias y combata la desinformación en la red social.

Yaccarino asumirá el cargo en unas seis semanas, según anunció Elon Musk este jueves, y RSF, que ha sido muy crítica con el dueño de la compañía, demandó a la nueva responsable "reformar Twitter para hacerla una plataforma beneficiosa para el acceso a la información", señalan.

"Esto no se conseguirá sin una confrontación con el empresario caprichoso que la compró", añade el responsable de tecnologías de RSF, Vincent Berthier, en un comunicado.

La organización estableció un decálogo de peticiones a Yaccarino para volver a hacer de Twitter una plataforma de contenidos fiables:

• Restablecer una certificación real de las cuentas, de forma que no se puedan usurpar identidades para dañar reputaciones o divulgar información falsa.
• Invertir en la lucha contra la desinformación, después de que lo intentos de Musk por recortar costes han diezmado los equipos de lucha contra este fenómeno.
• Promover la información fiable a través de sus algoritmos de recomendación, de forma que estos promuevan medios con la etiqueta JTI ("Journalism Trust Initiative"), iniciada por RSF.
• Reanudar el contacto con los medios de comunicación, y que el servicio de prensa de Twitter "cese sus respuestas insultantes a los medios".
• Establecer reglas claras de funcionamiento, dejando atrás las decisiones impulsivas del propietario.
• Fijar una moderación transparente para que los usuarios puedan contestar las decisiones.
• Concluir el proceso de apertura del código de Twitter con el retorno de las interfaces de programación de aplicaciones gratuitas.
• Dar un estatuto a los influencers, de forma que los más importantes estén sujetos a obligaciones concretas.
• Transparencia de los influencers respecto a sus afiliaciones políticas y acuerdos comerciales.
• Someter a los influencers a un código de conducta estricto para asegurar, sobre todo, que no difunden desinformación, con sanciones en caso de incumplimiento.