El Gobierno alemán y los estados federados acordaron este domingo decretar un "confinamiento duro" a partir de este miércoles para tratar de atajar la propagación de la pademia del coronavirus, se informó oficialmente.
La canciller alemana, Angela Merkel, y los jefes de los 16 estados federados consensuaron en una teleconferencia dar este paso, que supone un endurecimiento con respecto a las restricciones a la vida pública y la actividad comercial vigentes desde noviembre.
Tan sólo los comercios esenciales podrán abrir a partir del 16 de diciembre. Los colegios también cerrarán sus puertas como tarde este miércoles y prolongarán sus vacaciones navideñas tres semanas y media, hasta el 10 de enero (frente al 4 de enero inicialmente previsto).
Las reuniones, también en Navidad, se limitarán a cinco personas de dos domicilios (sin contar los menores de 14 años). Además se recomienda el trabajo desde casa y se mantiene la prohibición de viajar.
El ministro de finanzas, Olaf Scholz, anunció que en breve se aprobará un nuevo paquete de ayudas para apoyar a la economía, en la línea de las aprobadas hasta el momento durante las restricciones previas.
Merkel defendió el pasado miércoles un endurecimiento de las restricciones a la vida pública y la actividad económica, también en Navidad, ante el elevado número de muertos. Pero las competencias en ese ámbito recaen en los estados federados, que hasta el momento se habían mostrado reticentes o no habían sido capaces de consensuar una postura unificada.
Alemania registró en las últimas 24 horas 20.200 nuevos contagios por covid-19 y 321 muertes, según cifras del Instituto Robert Koch (RKI), centro epidemiológico de referencia.