El exmiembro de Vox acusado de atacar un mural feminista lo niega y asegura que estaba en casa
- El mural feminista fue atacado en 2021 con pintura negra sobre las imágenes de todas las mujeres que aparecían representadas
El exvicesecretario de Juventudes de Vox Luis Felipe Ulecia, para quien la Fiscalía pide tres años de cárcel por presuntamente vandalizar un mural feminista municipal en 2021, ha negado que lo hiciera, asegurando que estaba en su casa, y al ser preguntado sobre el feminismo ha dicho que comparte ciertas ideologías de Vox en ese ámbito.
La Audiencia Provincial de Madrid juzga este martes a Ulecia, que ocupó el puesto 12 en la lista de Vox al Ayuntamiento de Madrid y que ahora no tiene ningún cargo orgánico en el partido, por los hechos ocurridos el 8 de marzo de 2021, Día Internacional de la Mujer, cuando el mural feminista fue atacado con pintura negra sobre las imágenes de todas las mujeres que aparecían representadas.
Era un mural de titularidad municipal y estaba ubicado en el centro deportivo municipal La Concepción, en la calle de José Hierro de Madrid.
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La Fiscalía pide en sus conclusiones provisionales tres años de prisión para el procesado por supuestos delitos contra la dignidad y el patrimonio artístico, por ayudar en esa acción, mientras que la defensa defiende la absolución.
El acusado ha negado que participara en la acción, explicando que esa noche estaba en casa con su mujer, que estaba embarazada.
Ha relatado que el día anterior fue a comprar pintura negra y otros productos a una gran superficie, pero dentro de su trabajo, consistente en proporcionar material para conservación de edificios. Estos materiales los entregaba a un encargado, que era el que luego los distribuía, de modo que él no sabía dónde acababan exactamente.
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Ha incidido en que él compró un material que en parte apareció en el lugar de los hechos, pero en parte no, y que la pintura negra que compró era para pintar en una comunidad y que la pueden adquirir muchas personas en grandes superficies.
A preguntas del fiscal sobre qué opina sobre los ideales que representaba el mural vandalizado, el acusado ha respondido que comparte con el partido en el que militó, Vox, "ciertas ideologías relacionadas con el feminismo".
El mando de la Policía Municipal de Madrid que llevó la investigación ha relatado que, tras iniciar varias vías de investigación, se centraron en el material usado para vandalizar el mural y vieron "una singularidad muy importante", que es que una de la pinturas usadas era una mezcla hecha en un Leroy Merlin que tenía un código propio, diferente a los genéricos.
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Este código aparecía en el tique de compra que pagó Ulecia con su tarjeta, según constataron luego, de modo que descartaron otras hipótesis sobre la autoría.
Por su parte el responsable del centro municipal en el que estaba el mural ha explicado que se trataba de una obra que representaba el feminismo con mujeres relevantes y que era muy visitado, por lo que tras el ataque fue reconstruido y se le dio protección. Meses más tarde fue atacado de nuevo pero no sufrió daños graves por esa protección.
Una integrante del colectivo feminista de Ciudad Lineal ha testificado que el mural representaba unos valores relevantes y que cuando fue atacado ella se sintió "triste y tachada como mujer".
La portavoz de ese colectivo, Ana Gabana, ha dicho al entrar a la sede judicial que aquella acción fue "un ataque a las mujeres" y representó "un odio a las mujeres total", y ha considerado que "falta gente en el banquillo" de los acusados porque participaron más personas.
