El Ayuntamiento de Madrid ha denegado el permiso para operar en la capital a tres compañías de patinete eléctrico, VOI, Wind y Lime, y les da 72 horas para retirar estos vehículos de las calles.
Según ha adelantado El Diario y El Independiente y han confirmado a Efe fuentes del Ayuntamiento, el veto a estas empresas se debe a que en sus aplicaciones no vetan, como pedía el Consistorio, que el trayecto se inicie o se termine en zonas donde no pueden circular estos vehículos, como calles y espacios peatonales o vías con múltiples carriles de circulación y con una velocidad de 50 km/hora.
Desde la entrada en vigor de la ordenanza de movilidad sostenible, el Consistorio obliga a las empresas de patinete compartido a obtener una autorización municipal para poder operar en la ciudad.
Los patinetes eléctricos ya inundan las calles de Madrid desde hace meses y, ante esta situación, el Ayuntamiento de Madrid prohibió su uso en las aceras.
En los tres casos notificados este martes, podrán volver a solicitar nueva petición de autorización en cualquier momento conforme a lo previsto en la Ordenanza de Movilidad Sostenible.
Requisitos
Entre otros requisitos, las empresas deben tener seguro, adecuar sus aplicaciones (apps) a las zonas transitables en patinete eléctrico (calles a 30 kilómetros por hora, carriles bici y pistas bici) y garantizar la interoperabilidad de sus sistemas informáticos de localización de los patinetes con los del Ayuntamiento para que se pueda comprobar el número y la ubicación de sus patinetes conforme a la autorización otorgada.
Según la Ordenanza de Movilidad Sostenible, en vigor desde el 24 de octubre pasado, los patinetes eléctricos -que tienen prohibido ir por la acera- pueden circular por carriles bici y por calles a 30 kilómetros por hora a lo largo de un 85% de las calles de Madrid, fundamentalmente aquellas de un carril por sentido o un solo carril.
Será el Ayuntamiento de Madrid con sus recursos quien retire los patinetes eléctricos de estas empresas si éstas no lo hacen en el plazo dado de 72 horas, ha informado la delegada de Medio Ambiente y Movilidad, Inés Sabanés.
