La Asociación Hosteleros de la Plaza Mayor prevén facturar este Puente de la Constitución un 50 por ciento menos que otros años, debido a las restricciones provocadas por el coronavirus y el cierre perimetral de la región, aunque consideran que la posibilidad de instalar terrazas ha sido un "balón de oxígeno".
De los 20 locales con los que cuenta la Plaza Mayor en condiciones normales, ahora se encuentran cerrados siete y abiertos trece. Se trata de un porcentaje que encaja con lo que está ocurriendo en otras ciudades, donde también están cerrados un 30 por ciento de los establecimientos.
Así lo ha señalado el presidente del Gremio de Restauradores de la Plaza Mayor, en Madrid, Antonio Aparicio, quien ha destacado el comportamiento "perfecto de los ciudadanos" así como la "solidaridad" con el sector, al mostrar "paciencia en la atención". "Estamos atendiéndoles como podemos con las restricciones que tenemos de aforo y limitaciones", ha declarado.