La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, ha sugerido la posibilidad de poner en marcha una escuela de verano de mediación teniendo en cuenta las características de la ciudad, para la que quiere el título de "capital de la paz".
Carmena ha escuchado desde los jardines de Cecilio Rodríguez la experiencia de mediación escolar de tres institutos públicos de Madrid. Así, alumnos del IES San Isidro han hecho un simulacro de mediación de un servicio que arrancó en el instituto hace quince años y que se diferencia de otros en la importancia que dan a las actividades en favor de la igualdad de género. Desde el IES San Isidro, con cuatro alumnos transexuales, defienden que la mediación es clave para prevenir casos de acoso entre la población LGTB.
Los alumnos y profesores del IES Alameda de Osuna han explicado a Carmena que el primer obstáculo a superar pasa por "vencer la dinámica de ser considerado un chivato al servicio de no se sabe qué potencia oscura", sensación compartida por el IES Madrid Sur.
Ante alumnos de estos institutos, la alcaldesa les ha explicado que en abril el Ayuntamiento organizará un congreso mundial sobre habilidades para resolver conflictos en la sociedad sin violencia, al que están llamados alcaldes de todo el mundo.
"Madrid es una ciudad poco violenta pero de vez en cuando muere algún joven aunque no debería morir ninguno", ha expuesto ante los estudiantes, lo que le ha llevado a defender la tranquilidad de la ciudad como requisito para ser anfitriona en un foro de mediación como el previsto.
A los alumnos participantes en la jornada les ha manifestado que la mediación es "un instrumento que hoy cotiza en el mundo" a través de la profesión de coach, es decir, "gente que necesita ayudar a despertar, modificar y perfilar habilidades". "Prometéis una barbaridad. Claro que el mundo puede cambiar a mejor escuchándoos", ha declarado.
