Un total de 45 trenes de Metro de Madrid están paralizados actualmente por averías en equipos con presencia de amianto, han indicado a Efe fuentes de la compañía.
En concreto, son 24 trenes de la serie 2000 -de las líneas 1 y 5- y 21 de la serie 5000 -de las líneas 6 y 9-, aunque el número varía en función del avance de las labores de retirada del amianto que se están llevando a cabo.
Según la empresa, la paralización de estas unidades no está afectando a la prestación del servicio a los usuarios, porque dispone de "la flota suficiente" para responder a la demanda actual.
Los trabajos del plan de retirada del amianto en la red del suburbano madrileño, que se puso en marcha en enero de 2018 con una dotación presupuestaria de 140 millones de euros hasta el año 2025, avanzan conforme a los plazos establecidos, han señalado desde la compañía.
El 50 por ciento de las piezas con amianto detectadas en los trenes de Metro de Madrid ya han sido retiradas.
No obstante, algunos componentes que ya han sido eliminados en su totalidad, como es el caso de los disyuntores o las zapatas de freno, mientras se sigue trabajando en otros como las placas de resistencia, de las que ya se han quitado el 74 por ciento de los trenes 5000 segunda serie, y se acaba de comenzar con la extracción de los cofres contactores de los 5000 segunda serie, que se encuentra al 3 por ciento.
La inversión de 140 millones se destinará solamente a los trabajos que tengan que ver con la retirada del amianto, han destacado fuentes de la empresa, que han dicho que es "falso" que parte de esta cantidad se vaya a dedicar a la remodelación de estaciones, como sostienen el sindicato de maquinistas y Comisiones Obreras.
Metro de Madrid ya ha ejecutado trabajos de retirada de amianto de varias estaciones e instalaciones de la red.
Aprovechando las obras en línea 9 de este verano, se han desamiantado los cuartos técnicos y bóveda de las estaciones de Pavones y Príncipe de Vergara.
También se han desamiantado todos los cuartos técnicos de Vinateros y se han comenzado los trabajos de retirada de este mineral de los cuartos técnicos de Estrella.
Igualmente, se ha quitado el amianto de la bóveda de los andenes de la estación de Gran Vía durante el verano y ya se ha completado la retirada de este mineral de los cuartos técnicos de las estaciones Canillejas, Torre Arias, Portazgo, Avenida de la Paz, Pirámides, Campamento y Las Musas.
Asimismo, se han desamiantado varios cuartos técnicos de las estaciones de Esperanza y Buenos Aires.
En los próximos meses, se procederá a retirar los elementos con amianto en los cuartos técnicos de las estaciones de Pacífico, Buenos Aires y Estrella (en el caso de las dos últimas estaciones se actuará en los cuartos pendientes).
Asimismo, se están retirando elementos con amianto, como cubiertas y tuberías, en recintos de trabajo como Cavanilles y los depósitos de Cuatro Caminos, Ventas y Canillejas.
Desde la compañía, han recalcado que "no existe ningún riesgo para la salud ni de los trabajadores ni de los viajeros".
Entre 2017 y 2018, Metro de Madrid ha realizado 832 reconocimientos médicos específicos a 703 trabajadores del suburbano madrileño para descartar cualquier problema de salud relacionado con la exposición a fibras procedentes de amianto y todos han dado negativo.
Antes de que acabe el año, se habrán realizado los reconocimientos a los cerca de mil trabajadores de la plantilla (917) que están siendo objeto de una vigilancia específica de la salud.
Hasta el momento, son cuatro los casos de trabajadores de la compañía con enfermedad profesional como consecuencia de su exposición a fibras procedentes del amianto, de los cuales dos han fallecido (uno de ellos murió el pasado 24 de mayo y otro el pasado 4 de octubre). Uno de los cuatro casos ha sido declarado como enfermedad profesional en periodo de observación.