La edad de la madre determina las características y la fisiología de su descendencia y crea diferencias en individuos genéticamente idénticos, según un estudio realizado en pequeños gusanos que comparten muchos genes con los humanos, a cargo de científicos del Centro de Regulación Genómica (CRG) de Barcelona.
El trabajo, publicado en la revista 'Nature', ha detectado que "las madres muy jóvenes producen una descendencia con defectos en varias características", como el tamaño, la tasa de crecimiento y la resistencia al hambre, ha explicado el investigador posdoctoral y co-primer autor del artículo Mirko Francesconi.
"La descendencia de las madres jóvenes tiene a la vez menos descendencia" cuando llega a la edad adulta, ha añadido, en un comunicado del CRG este miércoles.
MENOS NUTRIENTES
Estas diferencias se deben principalmente a que las madres jóvenes proveen a los embriones con menos vitelo, el conjunto de nutrientes con los que se alimenta el embrión, lo que en los gusanos es beneficioso para acortar el tiempo entre generaciones, con un efecto positivo en su nivel adaptativo.
El equipo estudia desde hace tiempo "por qué individuos genéticamente idénticos que comparten el mismo ambiente a menudo presentan diferencias sustanciales en sus características", según el profesor Icrea y coordinador del Programa de Biología de Sistemas del CRG, Ben Lehner.
Lehner ha destacado que estos descubrimientos muestran "cómo la fisiología de la generación previa puede alterar no solo el desarrollo embrionario de un animal sino también sus características cuando sea adulto".