Los mayores asiduos al centro de de la Asociación Cárcavas San Antonio, en el distrito de Hortaleza, llevan todo la mañana en pie de guerras. Sobre ellos pende la amenaza de un desalojo. Según el Ayuntamiento, este bar no tiene licencia de actividad ni seguro. Los mayores niegan la versión municipal.
A las diez de la mañana estaba previsto pero el desalojo, pero los mayores han recibido un balón de oxígeno inesperado. Una patrulla de policía desplazaba a la zona les ha comunicado que el temido desalojo se aplaza por el momento, aunque el tema no se cierra de manera definitiva. Ahora queda tiempo por delante para citas, requerimientos y recursos.
Este fin de semana los mayores podrán volver a utilizar las instalaciones del centro, como llevan haciendo más de 20 años para hacer lo que más les gusta: bailar. Especial agradecimiento se han llevado nuestros compañeros de Buenos Días Madrid, por acompañar a los mayores durante toda la mañana y hacer de altavoz de sus reivindicaciones.
