Ataque de buitres hambrientos a ganado vivo en la sierra de Madrid

  • Un ganadero graba la agonía de una vaca y su ternero recién nacido atacado por buitres

Ataque de buitres hambrientos a ganado vivo. Sucede en la sierra de Madrid. Un ganadero de Horcajo de la Sierra ha grabado la agonía de una novilla atacada en pleno parto por buitres este fin de semana para denunciar una práctica cada vez más frecuente. El ataque acabó con la muerte del animal y del ternero recién nacido.

Los ganaderos señalan que antes los animales muertos se dejaban en el campo pero, después de la crisis de las vacas locas en 2011, tienen la obligación de llevar los animales a incinerar.

Un hecho que, según los ganaderos, está provocando que los buitres pasen hambre y cambien su comportamiento natural para atacar a animales vivos para alimentarse, aprovechando el estado de debilidad de los animales, por ejemplo, en los partos.

Algo que los naturalistas niegan, ya que señalan que los buitres no están preparados morfológicamente ni tienen instinto depredador para atacar a animales vivos.

Sin embargo, los ganaderos han grabado ya varias situaciones en que se producen dichos ataques, admitiendo los naturalistas que los buitres podrían atacar, aprovechando animales que estén en situaciones muy delicadas de debilidad, como un parto.

"Estas aves están aprendiendo a matar a animales que tienen poca movilidad"

"No es la primera vez que pasa, porque también ha ocurrido a otros ganaderos". señala Carmelo, el ganadero que grabó las imágenes quien remarca que "estas aves están aprendiendo a matar a animales que tienen poca movilidad".

Lo peor es que para poder recibir las indemnizaciones que concede la Comunidad de Madrid hay que demostrar "que el animal ha sido muerto por los buitres estando vivo. Yo tuve la suerte de llegar antes que el animal estuviera muerto".

Los ganaderos reclaman cursar la Proposición No de Ley (PNL) aprobada para poder dejar nuevamente los animales muertos en el campo y sino que creen comederos, los llamados muladares, puntos donde se deja carroña para que ls buitres puedan alimentarse.