La sequía deja la huerta madrileña al 50% de su producción
- El aumento de costes de abonos y combustibles ha reducido el terreno plantado
- Hablamos con Pepe Cabrera, de 'La Huerta de Carabaña', sobre cómo se han adaptado a la escasez de agua
La sequía que afecta a la región está generando graves preocupaciones entre los agricultores locales, ya que se estima que la mitad de la cosecha en la huerta podría estar en peligro. Expertos advierten que la falta de precipitaciones está impactando severamente en la producción agrícola, lo que podría traducirse en una disminución del 50% en comparación con años anteriores.
La crítica situación hídrica ha llevado a muchos agricultores, como Pepe Cabrera, a tomar medidas drásticas para enfrentar la escasez de agua. Conscientes de las malas previsiones, varios cultivadores han optado por plantar solo la mitad de lo que solían hacer, afectando tanto los cultivos de secano, como cereales, olivos y vid, así como los productos de la huerta, como las alcachofas y los tomates que se están sembrando y cosechando actualmente.
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Sin embargo, la sequía no es el único desafío que enfrentan los agricultores. El aumento en los precios de los combustibles y los abonos está generando una presión financiera adicional. Estos costos adicionales están erosionando la rentabilidad de las explotaciones agrícolas, lo que representa una preocupación constante, declaran.
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"Hemos tenido que ser prudentes y enfocarnos hacia cultivos de bajo consumo de agua", explica Pepe Cabrera. "Lo hacemos con el sistema de goteo y plástico de protección para evitar la evaporación de agua, que es un tesoro y es lo que nos genera esta tensión en la agricultura".
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Lo que distingue a la explotación de Pepe Cabrera y otros agricultores en la región un compromiso con la sostenibilidad y la producción orgánica. A pesar de las dificultades, continúan utilizando métodos orgánicos para sus cultivos y riegan sus campos con agua proveniente de un manantial de renombre mundial, reconocido por sus propiedades mineromedicinales únicas. Aunque esta agua excepcional ayuda a mantener la calidad de los productos, la escasez hídrica actual está poniendo en peligro su capacidad para mantener la producción a niveles óptimos.
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Las autoridades locales y los expertos en agricultura están instando a la adopción de prácticas sostenibles y al uso eficiente del agua para mitigar los impactos negativos de la sequía en la producción agrícola. A medida que la sequía persiste, la incertidumbre rodea el futuro de la producción agrícola en Madrid.
