A empujones, patadas y bofetadas. Así ha reaccionado una mujer pillada con las manos en la masa tras robar en un supermercado de Cataluña. Ha agredido violentamente a los empleados que intentaban que no se marchase con los artículos robados.
La ladrona había robado varias cajas de langostinos y botellas de vino que escondía en el carrito de su hijo, repleto también de otros productos robados.
Un grupo de empleados le impidió que se llevara los artículos y la ladrona les agredió.
Con el cochecito de su hijo repleto
El suceso tuvo lugar en el supermercado de la cadena Mercadona de Cerdanyola del Vallès, en Barcelona, cuando una mujer intentó salir por la zona de paso sin compra. Es una situación que se repite con más frecuencia de lo que pensamos.
A la ladrona la acompañaba su hija mayor, que le pidió que colaborara y que se calmase, pero no lo logró, ya que usó también el carro para agredir a los empleados.
Al principio se excusó diciendo que había cogido comida para sus hijos, pero las cajas de langostinos y las botellas de licor y de vino la dejaron en evidencia.