Juani, una mujer de 81 años, ha lo que le ocurrió en un autobús de la línea 326, la que une Ambite con Arganda del Rey / Madrid.
Tenía cita con el médico en Arganda, pero al no tener bono transporte debido al confinamiento por la pandemia del coronavirus, intentó pagar el billete en efectivo, y no se lo aceptaron. Además, según denuncia, el conductor paró el autobús, y no reinició la marcha hasta que se bajó del autobús.
La versión de la empresa
Las empresa de transportes asegura que el conductor actuó de forma correcta y que no es exactamente como lo cuentan. Porque no la bajó enseguida sino que la mantuvo en el autobús durante un pequeño tramo del recorrido dentro del municipio y preguntó a los pasajeros si alguien podía marcar con su bono el pasaje de la señora y que luego ella le abonase el importe en metálico. Pero nadie quiso, según la versión de la empresa.
El conductor no tuvo más remedio que decirle que se bajara. Si hubiese hecho lo contrario habría infringido la norma por dejar a una pasajera sin billete en el vehículo. Tampoco podía aceptar metálico porque hay una normativa de la comunidad, a consecuencia del covid-19, que lo impide.
La empresa dice que la actuación del conductor fue impecable y que incluso fue más allá de sus atribuciones al intentar buscar una solución que permitiese a la señora continuar su viaje.
