Los equipos de rescate siguen intentando acceder al fondo del pozo donde cayó el niño de dos años en Totalán (Málaga) sin conseguir resultados, tras más de 17 horas de trabajo. Los efectivos han continuado trabajando durante toda la noche sin que de momento se haya conseguido acceder al fondo del pozo, de 110 metros de profundidad y 25 centímetros de ancho.
Los trabajos se centran en acceder con una cámara para visualizar dónde se encuentra el pequeño, que hasta ayer por la noche no había sido ubicado, aunque había alcanzado unos 75 metros de profundidad; también se trata de averiguar si hay agua en el fondo del agujero.
Un centenar de personas participan en el operativo de rescate del niño desde las 14 horas de ayer, domingo, cuando el padre del pequeño y el 112 avisaron a la Guardia Civil de que había caído por el agujero, un orificio de prospección para la búsqueda de agua, en esa zona de la sierra.
Al lugar se desplazaron efectivos del 112, Consorcio Provincial de Bomberos, Protección Civil, el Equipo de Rescate e Intervención de Montaña (EREIM) de Álora y Granada, submarinistas del instituto armado y bomberos de Málaga capital. así como empresas privadas que están facilitando ayuda y maquinaria para tratar de localizar al niño.