Chapinería fue la única patria chica conocida por Eloy Gonzalo, el héroe de Cascorro. Cuentan que Eloy salió de la inclusa madrileña adoptado por un guardia civil que estuvo destinado en varias localidades cercanas y que más tarde enloqueció tras la muerte de su esposa, dejándole de nuevo en el abandono.
El niño por su propio pie fue a buscar cobijo en la vecina Chapinería, donde encontró una nueva familia adoptiva. De Chapinería saldría Eloy Gonzalo para cumplir con un servicio militar que sólo hacían los más pobres, pues las clases pudientes podían pagar a un sustituto para que cumpliera por ellos y si fuera necesario diera su vida por la patria a cambio de la suya.
Valor y coraje
En Chapinería, un monumento recuerda al inventor del cóctel mólotov, al soldado sin fortuna al que la iconografía representa armado con una lata de gasolina dispuesto a terminar la guerra por su cuenta o a perecer en el intento.
El pueblo de Madrid adoptó a título póstumo a este perdedor nato y lo rebautizó como Cascorro en inspirada metonimia, haciendo de su nombre sinónimo de valor y coraje.