A tres kilómetros del barrio de El Pardo y en pleno monte se encuentra la Quinta del Duque de Arco, también conocida como la Quinta del Pardo.
El origen de la Quinta, se remonta al año 1717, cuando la finca de Valrodrigo fue adquirida por el Duque del Arco, Alonso Manrique de Lara y Silva uno de los cortesanos predilectos de Felipe V.
El Duque del Arco, encomendó la construcción de una edificación cuyo viso era semejante al del Palacio de la Zarzuela, del arquitecto Juan Gómez de Mora. En cuanto a los jardines se desconoce tanto el autor como el año exacto de su construcción.