La batalla entre una inquilina y el propietario en Móstoles
- Llevan dos meses sin luz y con humedades, por lo que ha dejado de pagar el alquiler
Estafada, así se siente Perla. En marzo, ya embarazada, alquilaba con su marido y sus dos hijas pequeñas una vivienda en Móstoles que aparentaba estar en buen estado, pero al mes comenzaba su pesadilla. Salieron las humedades ocultas y la oscuridad.
"Tenemos dos meses sin luz, pero las niñas la verdad no quieren estar ahí. Que por qué estamos en una casa tan fea, que por qué no nos vamos. Dicen que no les gusta y cuando vamos a casa de cualquier amiga se quieren quedar y no quieren volver aquí", nos cuenta Perla entre lágrimas.
El alquiler de una casa que se ha convertido en una batalla entre propietarios e inquilinos. "Me dijeron que llamarían a Iberdrola y pondrían el contador a la casa. Luego me dicen que no se van a gastar 7.000 euros en arreglarlo porque es una instalación que cuesta mucho dinero".
En marzo alquilaron la vivienda sin humedades y el propietario les aseguró que tenían contador para poder empadronarse. "Yo trabajo y puedo pagar el alquiler. En agosto le dije que cuando me pusieran la luz empezaría a pagar otra vez. En ese mes dejé de pagar".
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Durante seis meses, Perla tenía luz porque venía de la casa de enfrente, que es del mismo propietario. "Tenemos que estar con los teléfonos alumbrando. Cuando vamos a los bares, al hospital o donde alguna amiga cargamos los teléfonos. Esta situación es insoportable".
Con velas, camping gas para cocinar y haciendo compras diarias para que no se estropeen los alimentos. En cuanto a las humedades, al principio no se veían porque la casa estaba recién pintada hasta que empezaron a salir por el salón y ahora invaden toda la vivienda. Perla espera salir de esta situación para este 2024 y que se puedan solucionar las cosas.
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Tras conocer la situación en la que vive esta familia, contactamos con el propietario. "No sé nada de eso yo, la que lo lleva es mi hermana. Yo firmé el contrato de alquiler, eso está en denuncia y estas personas que están ahí lo que no han querido nunca es pagar y en su día entró con esas circunstancias. Eso está en manos de jueces y abogados y lo que tenga que salir ya saldrá".
Un testimonio que Perla desmiente por completo, ya que cuenta con un burofax que manifiesta no negarse a pagar en ningún momento, siempre y cuando le arreglen la casa, que está en muy mal estado.
