Wifi, whatsapp, redes sociales, compras online.... Las tecnologías que usamos a diario y sin las que muchas personas casi no pueden vivir, también han conquistado a la Iglesia. Ni siquiera los frailes dominicos han podido resistirse. Pero, ¿cómo y para qué se utilizan las nuevas tecnologías dentro de conventos o monasterios?
Hemos visitado la basílica de Nuestra Señora de Atocha. La iglesia más antigua de Madrid también es un ejemplo en el uso de aplicaciones y dispositivos móviles. Los dieciocho frailes dominicos que habitan en la basílica intercambian información, chatean con otros conventos, realizan compras de elementos litúrgicos e incluso estudian, imparten clases y corrigen exámenes. Un mundo que creíamos hermético y cerrado, está cada día más interconectado.