En la Comunidad de Madrid contrasta la sobreocupación de la capital y su área metropolitana con la despoblación paulatina de muchos de sus pueblos. Robregordo y Madarcos son los pueblos con menor número de habitantes (45 y 46, respectivamente) y otras ochos poblaciones no llegan a los 100 vecinos.
El Gobierno regional ha diseñado un plan de repoblación que incluye 60 medidas de revitalización, entre las que se incluyen la mejora del transporte, la inversión en vivienda, construcción de residencias, remodelación de colegios o wifi gratis.
Entre los nuevos pobladores, como hemos comprobado en Madarcos, gente que dejó la gran ciudad y ha preferido una vida más tranquila o dedicada a actividades relacionadas con el medio ambiente o el turismo rural.