La isla de Marstrand es famosa porque es donde se construyó la Fortaleza Carlsten, coincidiendo con la firma de paz del Tratado de Roskilde, entre Noruega, Suecia y Dinamarca. La fortaleza pasó por manos militares y llegó a ser una cárcel. Albergaba a los prisioneros condenados con cadena perpetua, quienes arrastraban una bola por grillete que pesaba más de 2 kilos.
Los propietarios nos llegan a mostrar la habitación donde dormían los presos el día antes de ser ejecutados. En esta habitación encontramos lo que se llamaba la Corona de Hierro, un grillete de cuerpo completo de 36 kg.
Hoy en día, la prisión se ha convertido en un hotel que cuenta con más de 20 habitaciones y donde también se organizan celebraciones. Recibe alrededor de 40.000 visitas al año.