El Jefe de Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), el general Miguel Angel Villarroya, ha subrayado este viernes el compromiso de las Fuerzas Armadas con las misiones que les otorga la Constitución frente a las consideraciones de militares retirados a los que acusa de arrogarse un derecho de representatividad "que no poseen", de "dañar" la imagen de los Ejércitos y la Armada y "confundir" a la opinión pública.
El general Villarroya reacciona así a las cartas remitidas al Rey o conversaciones privadas que han salido a la luz pública en la que militares ya retirados criticaban al Gobierno e incluso hablaban de golpes de estado o el "fusilamiento" de millones de personas.
"Nuestro compromiso con España y con la Constitución no ofrece ninguna duda y así lo venimos demostrando en nuestra actuación día a día", asevera el JEMAD.
El general Villarroya reconoce que, si bien, "la condición de militar trae consigo la limitación de ciertos derechos fundamentales como son la participación en manifestaciones o actividades de tipo político, sindical o reivindicativo, la afiliación o colaboración en organizaciones políticas o sindicales o la expresión pública de opiniones sobre ellas", los militares retirados ya no están sujetos a estas normas. No obstante hace hincapié en que las opiniones conocidas durante los últimos días "no pueden considerarse representativas del colectivo del que formaban parte con anterioridad" y pide que estas manifestaciones solo sean vistas "como opiniones de ciudadanos particulares".
La ministra de Defensa ha confirmado que ninguno de los integrantes cuyo contenido el Ministerio de Defensa puso en conocimiento de la Fiscalía sigue en activo en las Fuerzas Armadas y ha subrayado que "no se representan más que a sí mismos".Margarita Robles, ha acusado de "cobardía" a quienes se "embozan" en su antiguo uniforme militar para hacer comentarios que "avergüenzan a cualquier demócrata".
"Yo no soy quién para decir al Rey lo que tiene que decir", ha zanjado Robles en un acto en su Departamento después de que el ministro de Consumo, Alberto Garzón, haya defendido que el monarca debería desmarcarse de las posiciones antidemocráticas de estos militares retirados.