Moralzarzal comienza a revisar, durante tres meses, más de un centenar de viviendas y edificios para comprobar si en ellas hay gas radón.
Se trata de un gas generado de forma natural en suelos de zonas graníticas, como la sierra de Guadarrama, y cuya concentración en espacios cerrados puede resultar nociva y aumentar el riesgo de padecer cáncer de pulmón, según la Organización Mundial de la Salud.