Robles protesta ante la OTAN por excluir a la industria española y amenaza con bloquear el plan de producción
- En la cumbre de Vilna, que tendrá lugar el mes de julio, será ratificado el plan de acción para la producción de Defensa
España no estará presente esta tarde en la reunión de la OTAN con la industria de Defensa. La ministra Margarita Robles ha anunciado que no acudirá a la cita como medida de protesta por no haber sido invitada ninguna empresa española del sector armamentístico a diferencia de otros países. Solo tres países de la Alianza se han quedado sin representación del sector en esta reunión.
Defensa planta a la OTAN por dejar fuera a las empresas españolas
En declaraciones desde la sede de la OTAN en Bruselas, donde se reúnen los ministros de Defensa aliados, Robles ha defendido el plantón a la reunión en respuesta a la exclusión de las empresas españolas. "Es evidente que España tiene que estar, alguna empresa española debe estar representada porque la industria de defensa española es muy buena, crea mucha innovación y tecnología y muchos puestos de empleo", ha subrayado.
Robles ha llegado a amenazar con bloquear la aprobación del plan de acción para la producción de Defensa, que ratificarán los líderes aliados en la cumbre de Vilna de julio.
La ministra ha mantenido una reunión con Jens Stoltenberg para transmitir su queja y ha asegurado que España va a "vetar" el plan de acción de producción de Defensa de la OTAN "hasta que no se reconsidere" la presencia de armerías españolas.
España es el vigésimo segundo donante de armas a Ucrania. Desde Defensa destacan que es el noveno aliado en términos absolutos y el quinto mayor contribuyente en operaciones y misiones.
En todo caso, la cita de este jueves en Bruselas es "una primera reunión de contacto" entre representantes públicos y de la industria de Defensa "para ver cual es el futuro de la posición de la industria", ha defendido Robles que ha indicado que de momento la ausencia de España no tiene implicaciones porque la reunión es de carácter informal y por lo tanto de ella no saldrá "ninguna planificación, ni actuación", aunque a ojos de Madrid supone un precedente que considera un mal punto de partida.
