La Policía Nacional encontró el cadáver de la mujer, de 92 años, en avanzado estado de descomposición. Su hijo lo mantenía en su domicilio del número 12 de la calle Salvador Alonso. En su interior, los agentes descubrieron un ataúd de madera construido de forma artesana y casera y precintado. Dentro estaba el cadáver de la anciana, que por los primeros signos habría muerto hace un año.
Los vecinos de la vivienda alertaron a los servicios de emergencias por el fuerte olor que desde hacía semanas desprendía el piso.
"Nos ha engañado todo este tiempo", dice una vecina al reportero de Telemadrid. Ha confirmado que no veían a la mujer fallecida desde hacía un año. Otra vecina, testigo de la detención, afirma que el hombre estaba tranquilo.
El Grupo V de Homicidios se ha hecho cargo de las investigaciones, aunque los primeros indicios apuntan a que la anciana falleció de muerte natural. No obstante, tanto el tiempo que lleva fallecida como la causa la determinarán los especialistas del Instituto Anatómico Forense, donde fue trasladado el cadáver tras el levantamiento dictado por el juez.
Poco después, los agentes detuvieron por estafa al hijo de la difunta, una hombre de 62 años, al comprobar que había estado cobrando la pensión de su madre a sabiendas de que había fallecido. También se analizará el estado mental del arrestado, ya que podría tener algún tipo de trastorno psiquiátrico.