"Han robado mis sueños y mi niñez", les decía, enfadada, con lágrimas en los ojos, la joven activista Greta Thunberg a los líderes internacionales en la Cumbre del Clima.
La Cumbre comenzaba este lunes por la tarde en Nueva York, despreciada por Donald Trump, que apenas ha estado unos instantes. Por ahora, 70 países se han comprometido a endurecer sus planes de recorte de emisiones de gases efecto invernadero.
"El cambio viene, les guste o no", aseguraba la joven activista sueca Greta Thunberg, líder del movimiento juvenil contra la crisis climática, que acusó a los jefes de Estado y de Gobierno de no hacer los suficiente para revertir la crisis climática al comienzo de la Cumbre de Acción Climática que se celebra hoy en la sede de Naciones Unidas.
"Se están muriendo los ecosistemas, estamos a las puertas de una destrucción" masiva, agregó la joven activista de 16 años, que acusó a los líderes mundiales de mirar para otro lado o pensar únicamente en el dinero.
El secretario general de la ONU, António Guterres, afirmó este lunes que "la emergencia climática es una carrera que estamos perdiendo, pero es una carrera que podemos ganar", y reclamó "transformaciones fundamentales en todos los aspectos de la sociedad" para evitar que el planeta se caliente hasta superar el límite crítico de 1,5ºC más respecto a la era preindustrial.
Guterres señaló que el último julio fue el mes más caluroso jamás registrado, el trimestre de junio a agosto fue el verano más cálido en el hemisferio norte y el segundo invierno más caluroso en el hemisferio sur y el quinquenio entre 2015 y 2019 es el mayor temperatura "de la historia". "Si no cambiamos urgentemente nuestras formas de vida, pondremos en peligro la vida misma", añadió.
Guterres recordó que la comunidad científica apremia a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 45% para 2030, lograr la neutralidad de carbono en 2050 y limitar el aumento de la temperatura global a 1,5ºC a finales de este siglo. "Por tanto, es necesario acelerar la financiación climática", aseveró, en alusión a que los países desarrollados deben cumplir el compromiso de movilizar 100.000 millones de dólares en 2020 para el Fondo Verde para el Clima con el fin de ayudar a las naciones en desarrollo a adaptarse y mitigar los efectos del cambio climático."Hay un coste para todo, pero el mayor coste es no hacer nada".
El desprecio de Trump
El presidente estadounidense, Donald Trump, se sentó este lunes brevemente en el auditorio de Naciones Unidas donde se celebra la Cumbre de Acción Climática, pero no intervino en esa reunión de alto nivel a la que no estaba previsto que acudiera. Llegó a la reunión cuando el primer ministro de la India, Narendra Modi, comenzaba su discurso, y le aplaudió cuando finalizó. El mandatario también escuchó a la canciller alemana, Angela Merkel, y abandonó la sala cuando comenzaba un panel encabezado por el presidente de Chile, Sebastián Piñera.
El mandatario, un escéptico del cambio climático que ha contraprogramado de hecho la Cumbre del Clima con una reunión sobre la protección de la libertad religiosa que comenzó poco después de la reunión climática aseguraba al salir: "Soy un gran creyente en el aire limpio y el agua limpia, y todos los países deberían unirse y hacer eso, y deberían hacerlo por sí mismos. Es muy, muy importante", dijo Trump a los periodistas al salir de la cumbre.
Pedro Sánche
Pedro Sánchez podría reclamar acciones "valientes" para afrontar la emergencia climática asegurando el pleno compromiso de España.
Fuentes del Gobierno español avanzaron que España aportará 150 millones de euros en los próximos cinco años al Fondo Verde Para el Clima de Naciones Unidas, el principal mecanismo financiero para apoyar acciones de mitigación y adaptación al cambio climático en los países en desarrollo.