Marco Asensio contestó a la exhibición de Isco Alarcón ante el Betis el pasado fin de semana con un gran partido frente al Legia Varsovia, que sufrió el buen juego del centrocampista blanco en una noche en la que adelantó al colombiano James Rodríguez. Además de la presencia en el once inicial del costarricense Keylor Navas y del brasileño Danilo, Zinedine Zidane aportó un par de novedades más en su alineación frente al cuadro polaco.
Los nombres más llamativos para el espectador fueron los de Asensio y James. Ambos, junto a Toni Kroos, formaron parte de un centro del campo del que desaparecieron Isco y Mateo Kovacic. Sin duda, tuvieron una oportunidad única para agradar al técnico francés y ponerle las cosas muy difíciles para un puesto muy codiciado.
Sin Luka Modric y Casemiro, los dos lesionados, el centro del campo blanco tiene muchas vacantes libres para acompañar a Toni Kroos. Parece que Kovacic tiene una medio asegurada y la otra se la disputan tres nombres. Con Isco un escalón por delante de sus compañeros tras el choque del Benito Villamarín, Asensio y James tuvieron su opción.
Asensio, más entonado en general a lo largo del curso que el colombiano, brilló más que un James que anda descolocado, recién salido de una lesión y con pocos momentos de inspiración esta temporada.
Asensio distribuyó juego junto a Kroos con mucho criterio y desparpajo. Alargó su buen momento de la semana anterior, en la que completó buenos partidos con la selección española sub-21 a las órdenes de Santi Denia. El medio blanco fue el catalizador de la victoria ante el Legia Varsovia.
Además, adornó su buen partido con un gol en la primera parte y con una gran asistencia desde 30 metros que inició la jugada del tanto de Marcelo. Karim Benzema, desentonado a lo largo del choque, controló un balón llegado del cielo y se lo cedió al lateral brasileño, que anotó el segundo con un disparo que desvió un defensa del equipo polaco. El regalo no fue suyo, fue del centrocampista español.
Mientras, James no encontraba su momento. Estuvo voluntarioso y no escatimó en hacer el esfuerzo físico necesario para complacer a Zidane. Pero eso no bastó para dar un puñetazo encima de la mesa. Algo falla en el colombiano, que últimamente sólo se encuentra a sí mismo en los partidos de su selección.
De los últimos compromisos de Colombia tuvo que volver por una lesión y se perdió dos duelos clasificatorios para el Mundial de Rusia. Ante el Betis no entró en la convocatoria y contra el Legia disfrutó de una titularidad que fue estéril.
Tal vez necesita minutos para, antes de volver a ser el jugador que asombró en el Mundial de Brasil y en su primera temporada en el Real Madrid, volver a tener el tono físico necesario para competir con dos jugadores que, por ahora, están por encima. Si había alguna duda en su lucha con Asensio, el choque ante el Legia la despejó. Asensio tiene una velocidad más que James y está a la altura de Isco.
Mientras vuelven Modric y Casemiro, parece que la titularidad es cosa de dos. James, sustituido en el minuto 63 por Lucas Vázquez, pasó prácticamente inadvertido en un día feliz para Asensio e incompleto para el colombiano, que, a la vez que recupera su mejor momento, ve cómo otros van a velocidad de crucero. Y en el Real Madrid el tiempo no juega a favor de los que van por detrás. Isco y Asensio ya caminan por delante.