El Atlético de Madrid decidió "suspender cautelarmente su condición de socio por tiempo indefinido" a tres de sus abonados a causa de "su presunta implicación en un delito de odio", tras ser identificados como autores de haber colgado el muñeco racista del delantero madridista Vinícius Jr. en un puente de Madrid.
La entidad colchonera informó de esta medida "tras la identificación y propuesta de sanción de la Comisión Antiviolencia de los presuntos responsables del 'repugnante e inadmisible' hecho", que se produjo el pasado enero durante la previa del derbi de Copa del Rey ante el Real Madrid, "y la comprobación por parte del club de que tres de ellos son socios abonados" de su Grada de Animación.
Según precisó en su página web, la normativa interna del Atlético tipifica como "muy graves" las faltas que supongan "un deterioro de la imagen, prestigio y consideración social del Club Atlético de Madrid" y que vayan contra "el compromiso de este club en su rechazo y oposición a cualquier forma de violencia verbal o física y a todo acto racista, xenófobo o intolerante".
"Reiteramos, una vez más, como ya expresamos en nuestro comunicado oficial del pasado 26 de enero, nuestra condena rotunda y sin paliativos ante cualquier acto que ataque la dignidad de personas o instituciones y nuestro compromiso para luchar y erradicar todo tipo de violencia en el deporte", prosiguió la nota de prensa.
"Como siempre hemos manifestado, nuestro club se ha caracterizado en sus 120 años de historia por ser un espacio abierto e integrador y no permitiremos que la actitud de unos pocos manche la imagen de miles y miles de aficionados atléticos que apoyan a su equipo con pasión y respeto al rival", reiteró el comunicado.
Asimismo, el Atlético animó a las autoridades "a investigar y resolver otras actitudes violentas y hechos relacionados con delitos de odio que se han producido esta temporada" en España.
"Este no es el fútbol que queremos y es responsabilidad de todos evitarlo", concluyó la nota.