Los campeones de Europa llegaron a la diosa en autobús descapotado
Redacción / Agencias
El Real Madrid se da un baño de multitudes ante los ojos de la diosa Cibeles que, por segunda vez este año, vuelve a vestirse de blanco.
Más de cien mil personas han esperado con una temperatura que superaba los treinta grados a su equipo durante horas.
El Real Madrid completó su paseo triunfal por las calles de la capital con su tradicional visita a Cibeles, después de cumplir con los actos institucionales en el Ayuntamiento, donde miles de personas agasajaron al flamante campeón de Europa.
Con el sol ya cayendo, los artífices de la decimoquinta Champions, lograda el sábado en Wembley ante el Borussia Dortmund, hicieron acto de presencia en una plaza a reventar, igual que todas sus calles adyacentes, desde varias horas antes.
Del Ayuntamiento, que siguió a la visita a la Comunidad de Madrid, salieron ya en un autobús descapotado que agrandó la sensación festiva.
La plantilla blanca pudo sentir el calor de la gente agolpada por alguna de las principales arterias de la capital, por Alfonso XII, Alcalá, Colón y Recoletos hasta llegar a Cibeles.
El técnico del Real Madrid, Carlo Ancelotti, repitió su foto con el puro y las gafas de sol, como había prometido, y sobre las 21.30, con algo de retraso en lo programado, la expedición llegó a Cibeles.
'CAMPEONES, CAMPEONES'
El himno del club y el 'campeones, campeones' fue el recibimiento, hasta que los protagonistas tomaron la pasarela levantada en la fuente.
El capitán, Nacho Fernández, fue el primero en tomar la palabra. "Muchas gracias por el recibimiento. Ha sido una temporada espectacular, ver la felicidad de todos es lo mejor que nos puede pasar. Este Madrid es increíble porque consigue cosas increíbles, no nos cansamos de ganar", dijo.
Después, el micrófono fue de mano en mano, aunque en su mayoría, Dani Carvajal, Lucas Vázquez o Vinícius, para quien pidieron el Balón de Oro, fue para entonar cánticos que siguieron los aficionados.
De nuevo, como en el balcón de la Comunidad en Sol, Toni Kroos fue de los más aclamados, en su despedida del club tras diez temporadas y 23 títulos, manteado por sus compañeros.
El alemán, además de agradecer "el cariño de diez años inolvidables", apuntó a Fede Valverde como su sucesor en el número 8 y el uruguayo no dudó en corresponder.
Luka Modric también se dedicó a cantar y Ancelotti 'empujó' Arda Güler a decir las cuatro palabras que sabía de español. El técnico fue breve también: "Gracias a vosotros, 90 minutos en el Bernabéu son 'molto longo'".
Después de corear el 'Hey Jude' por el inglés Bellingham y, seguramente, viendo el retraso en la programación pendientes de llegar al Santiago Bernabéu para la traca final, la función empezó a tocar su fin.
NACHO LEVANTA EL TROFEO
Nacho se subió a lo más alto de la Cibeles para enfundarla de bandera y bufanda, y levantar trofeo de la 'Champions', acompañado después por Modric, Carvajal y Kroos.
Los jugadores dieron una vuelta de honor a la diosa, agradeciendo el cariño de la gente que abarrotó la zona con muchas horas de espera. Las risas, las fotos y la bromas siguieron en el autobús, de nuevo en camino destino al Bernabéu, con el 'We are the Champions' que les habían recibido en la sede del Ayuntamiento.