Quique Sánchez Flores, entrenador del Getafe, afirmó en rueda de prensa que su equipo tiene que dar un paso adelante en lo que resta de temporada para no sufrir como el curso pasado, en el que coqueteó con el descenso casi hasta el final.
A 48 horas de enfrentarse al Diocesano en la Copa el Rey, el técnico del conjunto azulón analizó la actualidad de su equipo y resaltó que para el Getafe es "una obligación" eliminar a un equipo dos categorías inferior (Primera RFEF).
"Es tiempo de acción, no es tiempo de hablar. Es tiempo de que los cambios se vean sobre el campo. No en la palabra, ni en el discurso. Ni siquiera creo que sea tiempo de hablar para los jugadores. Todos tenemos que dar un paso hacia delante, estar más espabilados, acertar más en lo que hacemos", dijo.
"Somos conscientes de que hay que cambiar cosas y no queremos ser los mismos. Con lo mismo, vamos a ir muy justos y no nos gustaría tener que pasar otra vez por ese trago (el de pelear por no descender). Vamos a intentar cambiar cosas para, sobre todo, ganar. Al final, los discursos, sin victorias, no calan. Entrenamos para ganar. Sé lo que puede cambiar la mente de un jugador ganando o perdiendo. Queremos cambiar las cosas", insistió.
Para Quique, la Copa del Rey es una competición que interesa a su club y dejó claro que el Getafe intentará llegar lo más lejos posible en la competición.
"Igual que La temporada pasada era complicado compaginar una cosa con la otra (Copa y Liga), este año hemos hablado con el presidente y no molesta. En una Liga muy difícil, sabemos que va a ser reñido hasta el final y eso no quita energía para jugar la Copa del Rey e intentar llegar lo más lejos posible", indicó.
"Ante el Diocesano tenemos el hándicap del campo, muy pequeño y de césped artificial. Pero no vamos a poner excusas. Somos un equipo dos categorías superior al Diocesano y tendrán jugadores súper motivados que jugarán bien. Para estar en esas categorías, hay que jugar ya bien al fútbol. Con todo el respeto, iremos al máximo a intentar pasar a la siguiente ronda, que es nuestra obligación", apuntó.
Respecto al estado de su plantilla, desveló que tiene a todos sus jugadores listos a excepción de alguno "que arrastra alguna lesión nada grave" y el uruguayo Mauro Arambarri, que se un tobillo en el mes de octubre y aún necesitará más tiempo para recuperarse. "Vamos a ver cómo hacemos para este partido y que jueguen los más sanos y los que hemos preparado para este partido, añadió.
Asimismo, reconoció que en el mercado de invierno se podría marchar algún jugador y dejó claro que quiere una plantilla en la que los futbolistas que estén "quieran quedarse en el Getafe" para su "relanzamiento" en LaLiga Santander.
"No van a ser tampoco muchas (las posibles bajas). En cualquier caso, el club las tiene dirigidas, los jugadores se han dirigido al club y al entrenador. Es algún jugador que quiere dar hace tiempo ese paso. Son cuestiones no solo deportivas, también familiares".
También habló sobre la posible salida del delantero turco Enes Ünal, uno de los hombres más valiosos del Getafe: "Es un jugador muy importante para nosotros. No nos gusta hablar de ese tema porque sabemos que haría un daño tremendo a la plantilla. El fútbol es como es y son cosas que no se pueden controlar. A todos nos gustaría que Enes completara esta temporada con nosotros".