El Rayo Vallecano se llevó, con goles de Javi Guerra y Miku, tres puntos de oro (2-0) que le aferran a la permanencia a costa del Getafe, que sigue en descenso y en caída libre tras sumar el undécimo partido consecutivo sin conocer la victoria.
Con los nervios propios de saberse ante una final por la permanencia, Rayo y Getafe saltaron al césped de Vallecas con una única premisa, la de lograr tres puntos que mantuvieran vivas sus respectivas opciones de salvar la categoría.
JAVI GUERRA ADELANTA AL RAYO
Una de las claves pasaba por controlar los nervios y la presión y fue el Getafe el que, pese a un buen inicio, sufrió más esa losa durante el partido debido también a una mala dinámica de diez encuentros consecutivos sin conocer la victoria. A los diez minutos un gol anulado a Javi Guerra caldeó el ambiente en las gradas y también sobre el césped, puesto que la tensión se comenzó a mascar con ciertos rifirrafes entre ambos contendientes.
La tristeza por el gol anulado le tardó poco en cicatrizar al Rayo porque tres minutos después el mismo protagonista, Javi Guerra, fue el encargado de abrir el marcador al remachar un balón muerto en el área pequeña tras un rechace a disparo de Miku. La tensión le costó la roja al portero suplente del Rayo, Yoel Rodríguez, y al Getafe comenzó a jugarle malas pasadas con algunas perdidas en la medular que fueron enervando sus ánimos por momentos.
Hasta el minuto 31, con un remate de Álvaro Vázquez a la carrera, el Getafe apenas dio síntomas de peligro sobre la portería de Juan Carlos, que en algunas fases del encuentro se convirtió en un jugador más de campo sacando el balón jugado con los pies para nerviosismo de su afición.
En la segunda parte, el encuentro siguió discurriendo al ritmo que quiso marcar el Rayo Vallecano, que pudo ampliar su diferencia a los 58 minutos con un disparo de Pablo Hernández que se marchó fuera por muy poco cerca del palo derecho de Guaita.
ESCRIBÁ BUSCA SOLUCIONES
El técnico del Getafe, Fran Escribá, intentó buscar soluciones y la primera medida que tomó fue la de dar entrada al delantero sueco Henok Goitom, que debutó sustituyendo al centrocampista argelino Mehdi Lacen.
Con dos delanteros, el Getafe mejoró algo sus prestaciones ofensivas y ganó profundidad, pero siguió sin crear excesivo peligro, en parte porque los dos centrales del Rayo, Diego Llorente y José Ángel Crespo, mostraron la firmeza defensiva que su equipo venía demandando hace tiempo.
En el minuto 71, el Rayo sentenció el choque gracias a Miku, que marcó el segundo de su equipo al anticiparse en el primer palo a un centro desde la derecha de Pablo Hernández. A partir de ese instante el Getafe apeló a la heroica y tirando de orgullo quiso acercarse a la portería rival, en algunas ocasiones con peligro, como un disparo lejano de Medrán que se marchó alto, aunque sin inquietar demasiado a Juan Carlos.
