A pesar de ser el mayor de dos hermanos, a Íñigo Errejón Galván, madrileño de 35 años, los más próximos le conocen por 'el niño' por su aspecto barbilampiño. Pertenece a una familia de izquierdas y ecologista. Su madre, María de los Ángeles Galván, es bióloga y el padre, José Antonio Errejón, antiguo militante marxista del Partido de los Trabajadores de España, es funcionario, director de Políticas Ambientales en la agencia estatal de Evaluación y Calidad (Aeval) y fue uno de los firmantes del manifiesto de Tenerife (1983), origen de Los Verdes. La casa familiar en Pozuelo de Alarcón fue el hogar en el que creció Íñigo, que en pocos años paso de los ‘scouts’ a las Juventudes Anarquistas.
Tras abandonar el Instituto Camilo José Cela, Errejón se matricula en la facultad de Ciencias Políticas de la Universidad Complutense y allí, en el campus de Somosaguas, conoce a un grupo de jóvenes profesores y alumnos que marcará su devenir futuro: Pablo Iglesias, Juan Carlos Monedero, Carolina Bescansa, Luis Alegre e Irene Montero, la mayor parte de ellos discípulos del exdecano Heriberto Cairo.
Errejón combina sus estudios con el activismo político. Participa en las protestas antiglobalización de Praga y contra la segunda guerra del Golfo Pérsico y como organizador de la manifestación contra el gobierno del PP en la calle Génova, en plena jornada de reflexión tras los atentados del 11-M del 2004. Con parte de ellos funda la asociación estudiantil Contrapoder, que llevará a la facultad al presidente boliviano Evo Morales para dar una conferencia o participará activamente en el boicot a la presencia de la socialista Rosa Díaz en la facultad.
En Somosaguas se licencia en 2006 y obtiene su doctorado en 2011, con sobresaliente 'cum laude' con su tesis sobre ‘La lucha por la hegemonía durante el primer gobierno del MAS en Bolivia’. Ese MAS (movimiento al socialismo) que unió a Iglesias y Errejón en su tesis, será el motivo ocho años más tarde de su ruptura política, esta vez en versión Más Madrid.
'Pablistas' y 'errejonistas'
Antes de eso, en vísperas de las elecciones europeas de 2014, Errejón se convierte con ellos en cofundador de Podemos y jefe de una campaña que llevará, con el respaldo de 1.246.000 votos, a Pablo Iglesias y otros cuatro compañeros al Parlamento Europeo en Bruselas, convirtiéndose en cuarta fuerza política en esas elecciones. Por aquel entonces, Íñigo Errejón es secretario de Análisis, estrategia y cambio político de Podemos y gana un proyecto en la Universidad de Málaga para desarrollar un estudio sobre la vivienda en Andalucía. El contrato a cuya convocatoria únicamente concurrió Errejón, conlleva varias condiciones, entre ellas la de desarrollar el trabajo de manera presencial o solicitar la compatibilidad ante la Universidad, en el caso de ejercer alguna actividad alternativa. Errejón incumple ambas, pero no será sancionado.
2015 es año electoral con municipales, autonómicas y generales, además de andaluzas y catalanas. Errejón dirige en la sombra todas las campañas de Podemos, además de figurar como número 3 en la lista para el Congreso por Madrid de las elecciones generales, tras Pablo Iglesias y Carolina Bescansa. Errejón se convierte en diputado y portavoz del grupo Unidos Podemos en el Congreso. Por medio, dos Asambleas ciudadanas, las de Vistalegre I (2014) y II (2017), que dejarán diferencias políticas irreconciliables entre los fundadores de Podemos, con la división entre ‘pablistas’ y ‘errejonistas’ que miden sus fuerzas con listas alternativas, aunque Errejón renuncia a presentar candidato alternativo a la Secretaría general de Pablo Iglesias.
Iglesias obtiene el 60% de los puestos de la nueva ejecutiva y Errejón el 37%. Como certificación de su derrota, el 19 de julio de 2017, Irene Montero le sustituye como portavoz en el Congreso, aunque se le designa como candidato ‘in pectore’ de Podemos para la Comunidad de Madrid.
Año y medio después, con un Podemos en plena crisis en las encuestas, Iñigo Errejón escoge una fecha emblemática, la del quinto aniversario de la fundación del partido, para anunciar por sorpresa su alianza con Manuela Carmena para concurrir a las elecciones como candidato a la Comunidad de Madrid bajo la marca de Más Madrid en un intento infructuoso por aunar fuerzas en torno a una marca blanca de la izquierda. La respuesta de Iglesias, no se hace esperar: “Íñigo no es Manuela”, asegura al tiempo que anuncia que Podemos competirá con él.
Errejón logra para Más Madrid 20 escaños, muy por encima de los siete logrados por Unidas Podemos. Victoria, por tanto, también moral frente al 'pablismo' de la formación morada y origen de ver oportunidad de volver a la política nacional. Con Más País, Errejón se posiciona como un factor clave para desbloquear la situación política en el gobierno de España. Con Iglesias al frente, se enfrentan dos posturas similares ideológicamente, pero diferentes al mismo tiempo en las formas.