El juicio al futbolista Dani Alves, acusado de agredir sexualmente a una joven en la discoteca Sutton, ha quedado visto para sentencia en la Audiencia de Barcelona, y la defensa del jugador ha pedido que quede libre a la espera de sentencia.
En las tres jornadas que ha durado el juicio, su defensa ha intentado conseguir atenuantes para rebajar una eventual condena, a la vez que el jugador ha afirmado ante el tribunal que mantuvo sexo consentido con la víctima.
La denunciante ha ratificado que el futbolista la agredió en el lavabo de la discoteca, como ha mantenido desde esa misma noche, el 30 de diciembre de 2022.
La abogada de Alves, Inés Guardiola, persigue un atenuante por embriaguez para rebajar la condena, y, al no contar con un test de alcoholemia que lo acredite, ha tratado de demostrarlo con el testimonio de los amigos que cenaron con el futbolista y con una prueba pericial encargada a dos psicólogas, que han constatado que "sabía lo que estaba haciendo" aunque estuviera ebrio.
En el juicio ha declarado una veintena de testigos; entre ellos, la prima y la amiga de la denunciante con las que salió de fiesta esa noche, trabajadores de la discoteca que activaron el protocolo de agresiones sexuales y mossos d'Esquadra que la atendieron.
El tribunal publicará la sentencia en las próximas semanas, sin tener un plazo concreto: deberá resolver entre la absolución que reclama la defensa y las peticiones de condena de las acusaciones, de 12 años en el caso de la denunciante y de 9 de la Fiscalía.
El tribunal valorará si mantener a Alves en prisión preventiva
El tribunal también valorará si mantener al jugador en prisión provisional tras su juicio y mientras espera sentencia.
Los magistrados lo decidirán en los próximos días a petición de la abogada de la defensa, Inés Guardiola, que lo ha pedido al final del juicio, ofreciendo que a cambio el futbolista esté en libertad provisional y con el pasaporte retirado.
La Fiscalía se ha opuesto a dejarlo libre, teniendo en cuenta la falta de arraigo de Alves en España y su patrimonio, lo cual puede propiciar el riesgo de fuga. En el mismo sentido se ha posicionado la acusación particular que ejerce la denunciante, que ha recordado que en noviembre se rechazó por última vez su petición de dejarlo en libertad.