Así nació la pasión de Alberto Lamelas por el toreo

Alberto Lamelas es un matador de toros jienense, que desde muy pequeño tomó la decisión de vestirse de luces. A pesar de que en su casa no eran especialmente aficionados, sí existía una persona en su familia con una gran pasión por el toreo: su prima Elena Lamelas. Así, mientras que en su casa todos se llevaron las manos a la cabeza al escuchar la intención de Alberto, su prima apoyó con fuerza su decisión. "Cuando dije en mi casa que quería ser torero, lo primero que dijeron es 'el niño está loco'".

El origen de su pasión: su prima Elena

Podemos decir que Elena es en gran parte 'culpable' de la pasión de Alberto por los toros. Entre ellos había una conexión muy estrecha y es precisamente de esta unión de donde surge la idea de Alberto de ser torero.

Como ambos nos cuentan, son de un pueblo muy pequeño de Jaén (Segura de la Sierra) y los dos tienen la misma edad, lo que ha contribuido a que su relación sea muy estrecha y hayan compartido muchas vivencias juntos.

Cuando iban a merendar a casa de su abuela, siempre veían las corridas de toros que ponían en televisión. Este fue el primer contacto que tuvieron con el mundo del toro desde bien pequeños, un mundo que fascinó a Elena, que rápidamente se hizo una apasionada de la tauromaquia. "Un punto clave fue mi prima Elena. Ella fue aficionada a los toros mucho antes que yo, el año en el que el Juli tomó la alternativa".

Y fue ella precisamente, Elena, la supo contagiar su pasión y afición a Alberto, tanto, que este no tardó en determinar su destino.