“Lo que me gustaría es que los papeles femeninos en las películas de Bond fuesen diferentes, que fuesen más sustanciales y con un mayor reconocimiento”, afirmaba Ana de Armas en una entrevista para el The Sun.
Es una asignatura pendiente que tienen las cintas de 007 y que está sobradamente aprobada en ‘El agente invisible’ (‘The Gray Man’), la película de los hermanos Russo con la que Netflix ha tirado la casa por la ventana en lo que es, hasta el momento, su producción más cara (200 millones de dólares).
En la película interpreta a Dani Miranda, una dura agente que rivaliza con Ryan Gosling y Chris Evans y encadena escenas de acción, a veces, casi imposibles. La cinta tiene un enfoque diferente y bastante “refrescante” en palabras de la propia actriz, en cuanto a que, por una vez, la chica dura que aparece en la película no es el interés amoroso del protagonista. Se agradece y, por eso, Ana de Armas la califica de “distinta y genial”.
“Es importante poner a las mujeres en las películas de acción bajo esa luz y tener esa visión” ha comentado la actriz, para “acentuar su parte más dura". Se trata de demostrar que las mujeres también pueden asumir grandes papeles en películas de acción sin necesidad de ir colgadas del brazo de un hombre. Ni de llevar tacones.