Les Ballets Trockadero de Monte Carlo, una compañía compuesta íntegramente por hombres que interpretan "papeles para mujeres" con un enfoque "divertido", vuelven a Madrid para estrenar su nuevo espectáculo en el marco de una gira internacional que celebra el 40 aniversario de la agrupación neoyorquina.
"Que los bailarines vayan travestidos forma parte de la comedia, queremos darle un giro diferente al ballet clásico", ha explicado su director, Tory Dobrin, en la presentación del espectáculo a los medios.
En el mismo, que estará en cartel hasta el 17 de mayo en los Teatros del Canal, los bailarines interpretan piezas clásicas de El lago de los cisnes, Paquita y Go for Barocco ataviados con tutú y caracterizados como mujeres y dando vida a cisnes, ninfas del agua, princesas románticas, sílfides y féminas victorianas.
"Queremos que el público sepa en todo momento que se encuentra ante una compañía formada exclusivamente por hombres que hacen papeles de mujer, no queremos que en ningún momento se les confunda con bailarinas", ha explicado Dobrin, quien ha querido subrayar que ante todo se trata de "una parodia" con piezas "muy bien bailadas".
"Somos una compañía que ataca las piezas de ballet clásico creadas para mujeres haciendo que las representen hombres -ha expresado-, le damos el enfoque que le daría el bailarín a una pieza o una pose creada para una bailarina".
En este sentido, los integrantes de Les Ballets Trockadero de Monte Carlo se tratan de "bailarines profesionales que ya saben bailar" pero que se tienen que añadir a su repertorio "la técnica del trabajo en puntas", ha aclarado el director.
"Algunos de nuestros bailarines podrían parecer chicas a primera vista, pero, si pusiéramos una bailarina a su lado, el público se daría cuenta de que son muy diferentes: los músculos son diferentes, los pies mucho más grandes, las piernas más largas, los hombros más anchos", ha añadido.
Para ejemplificar la forma de trabajo de la compañía, Dobrin, aficionado al tenis, ha echado mano de los hermanos tenistas Arancha y Emilio Sánchez Vicario, explicando que los dos "aprendieron los mismos golpes y jugaban con una raqueta".
"La principal diferencia es que Emilio Sánchez Vicario es un hombre que le da mucho más fuerte a la pelota, y esa es la diferencia con nuestros bailarines, que le dan mucho más fuerte a la pelota", ha completado.
Dobrin también ha destacado la afluencia de "niños" a los espectáculos y ha contado que "cuando la compañía fue creada, en 1974, los montajes no eran aptos para público infantil". "Ahora los espectáculos son una maravillosa introducción a la danza para la gente que se está acercando a este arte, y una fantástica opción para toda la familia", ha concluido.
Para celebrar su 40 aniversario, Les Ballets Trockadero de Monte Carlo está embarcada en una gira internacional que le ha llevado a países como Estados Unidos, Alemania, Italia o Israel, y que ahora desembarca en Madrid durante dos semanas.